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Berri-Otxoak reparte pinchos de chorizo contra el recorte en las ayudas sociales de 1.200 familias

Berri-Otxoak reparte pinchos de chorizo contra el recorte en las ayudas sociales de 1.200 familias
La plataforma contra la exclusión social Berri-Otxoak ha repartido, en el marco de las fiestas de San Vicente, 2.000 pinchos de chorizo para denunciar los recortes en las ayudas sociales que necesitan cerca de 1.200 familias. La plataforma ha asegurado que se ha producido un "severo recorte" en las cuantías que reciben las familias para gastos de alquiler, sanitarios o hacer frente a las necesidades básicas. Además, ha criticado que la partida para ayudas sociales se mantenga congelada desde hace cuatro años, gracias al pacto entre PNV y PSE, en 960.000 euros anuales, mientras las 23 personas liberadas en el Ayuntamiento —concejales y cargos de confianza— suponen un gasto a las arcas municipales de 1’5 millones de euros. Todo ello pese al aumento en un 15% en el número de ayudas otorgadas, al pasar de 1.744 ayudas de 2015 a las 2.017 otorgadas en el 2016, según los datos del Ayuntamiento.

Comunicado de la plataforma Berri-Otxoak

COMUNICADO DE PRENSA

En el marco de las fiestas populares del barrio barakaldés de San Vicente se realizará la “6ª Txorizada Popular”; que consistirá en el reparto de 2.000 de pinchos de chorizo.

Bajo el lema “No hay pan para tanto Txorizo” se denunciará que el equipo municipal ha recortado las prestaciones destinadas a las miles de personas afectadas por la actual crisis económica.

Hay que tener en cuenta que desde el 19 octubre no se puede solicitar ninguna ayuda en la localidad. Pasados casi 4 meses cientos de familias tienen serias dificultades para llegar a fin de mes. Producto de la imposibilidad de acceder a las ayudas de emergencia social hasta nueva apertura.

Aumentan los recortes sociales en Barakaldo

Decisión a añadir al severo recorte en las cuantías a percibir por las familias: reducción en un tercio de la asignación para alquileres o hipotecas; en un 17% para gastos sanitarios; y un 10% a necesidades básicas: alimentación, vestuario o educación. Además de eliminar ayudas para mantenimiento, adaptación y reparación de instalaciones básicas de la vivienda o comunidad de vecinos.

Estas políticas de ajustes no son producto de la casualidad. Con los votos de PNV y PSE se decidió consolidar las políticas de recortes de los últimos años. Así, en los presupuestos del 2016 se acordó destinar la misma consignación económica que en 2015 (960.000 euros) para las ayudas de emergencia.

Según datos del consistorio se ha incrementado en un 15% el número de ayudas solicitadas por las familias: se ha pasado de 1.744 ayudas concedidas en el 2015 a las 2.017 otorgadas en el 2016.

No hay pan para tanto Chorizo

Hay que tener en cuenta que cerca de 1.200 familias dependen de las ayudas sociales municipales para las cuales se destinan 960.000 euros al año. Partida que lleva congelada 4 años.

Sin embargo, el pacto político suscrito entre los partidos PNV y PSE ha supuesto, en la práctica, ampliar la nómina de políticos liberados del equipo de gobierno; en la actualidad 23 personas. Esto supone a las arcas municipales 1’5 millones de euros. Dentro de este despropósito se crean dos nuevas áreas, con inexistentes atribuciones, donde colocar a otros tantos concejales del PSE para percibir sueldos millonarios: 80.000 euros anuales, incluidas retenciones y seguridad social.

¿Para qué y para quién no hay dinero?

En definitiva, esta iniciativa surge para denunciar que el gobierno local sigue recortando las ayudas de emergencia mientras incrementa la partida presupuestaria destinada a los sueldos de los corporativos a sueldo del equipo municipal. Mientras se congela el presupuesto destinado a protección social y se enduren los requisitos de acceso a las ayudas de emergencia social.

En concreto, nos encontramos con que la alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, cobra más que los ministros del gobierno de Rajoy; o que los presidentes de las comunidades autónomas de Andalucía, Murcia y Valencia. Además, su sueldo es superior al de los mandatarios de ciudades como Sevilla (con siete veces más de población) o Vigo (que triplica en residentes a la localidad fabril).

Desde hace 21 años la actual alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, percibe sus retribuciones a cargo de las arcas municipales: los mismos que lleva cobrando por concejala liberada; y ahora de alcaldesa. En concreto su salario, supone a los vecinos y vecinas de la localidad la friolera de 87.645 euros anuales: 74.307,38 de salario base; a lo que unir los 13.337,62 euros de cotizaciones a la Seguridad Social.