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El PSE acusa al PNV de recortar las ayudas sociales hasta 900 euros al año por familia

El grupo socialista en el pleno
Los socialistas, que también aplicaron recortes similares en los años que estuvieron en la alcaldía, denuncian que en 2015 fueron 261 familias las que no tuvieron ayudas sociales oficialmente por falta de presupuesto "cuando el Ayuntamiento cerró el año con un superávit de 7,71 millones de euros"
El Partido Socialista ha acusado al actual equipo municipal de Gobierno (PNV) de "recortar por decreto" el importe de las ayudas de emergencia social en Barakaldo, lo que puede suponer para cada familia perceptora una reducción de hasta 900 euros al año. El PSE, que ha exigido "la paralización de la medida", ha señalado que la decisión ha sido adoptada por la alcaldesa, Amaia del Campo, y supone bajar la cantidad máxima de ayuda social que se puede recibir. En concreto, pasa de 3.000 a 2.100 euros al año la subvención para el pago de cuotas del alquiler o hipoteca. Las ayudas para gastos de adaptación, reparación e instalaciones básicas en una comunidad de vecinos pasa de 1.850 a 1.150 euros; y para alimentación cae a 900 desde los 1.000 euros anteriores.

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> 09/02/2016. Denuncian que 260 familias no recibieron ayudas sociales en 2015 por falta de presupuesto
> 01/02/2016. 1.678 familias de Barakaldo piden en seis horas cita para ayudas sociales el primer día del plazo
> 01/02/2016. Denuncian que se congela el dinero de ayudas sociales pese al aumento de solicitudes
> 24/08/2015. El PNV también ordena por decreto un recorte del 50% de las ayudas sociales para vivienda
> 22/07/2014. El PSE decide por decreto recortar un 50% las ayudas sociales para pago de alquiler e hipotecas



Nota de prensa del PSE
El Ayuntamiento de Barakaldo recorta las Ayudas de Emergencia Social

  • Reduce por decreto el tope máximo que se puede cobrar por ayuda, con lo que los preceptores recibirán hasta 900 euros menos al año
  • Los socialistas piden paralizar una medida que empeora la situación económica de las familias más necesitadas


La alcaldesa de Barakaldo (PNV) aprobó en la tarde de ayer el decreto que regula la cuantía de las Ayudas de Emergencia Social (AES) por cada uno de los conceptos contemplados: alquiler o pago de la hipoteca, alimentación... La resolución establece una rebaja generalizada del tope máximo que se puede cobrar por ayuda, con lo que los preceptores recibirán en 2016 hasta 900 euros menos al año que el ejercicio anterior.

Este importante recorte no ha pasado desapercibido para el PSE-EE. La concejala socialista Alba Delgado ha pedido hoy la paralización de la medida, que va a causar un daño irreparable en centenares de familias barakaldesas: “A menos dinero, más dificultades. Resulta evidente que se va a empeorar la situación de las personas más necesitadas de Barakaldo”.

Las Ayudas de Emergencia Social (AES) son concedidas y gestionadas por el Ayuntamiento, si bien su financiación y el marco legal que las regula es competencia del Gobierno Vasco. En Barakaldo, el dinero que llega del Ejecutivo autónomo nunca es suficiente, de ahí que cuando estaba en el Gobierno local el PSE-EE siempre habilitara una partida extraordinaria con fondos municipales para cubrir el 100% de las ayudas. Una partida que rozaba el millón de euros en los últimos años.

En 2016, con el PNV en el Gobierno municipal, aún se desconoce el importe de la aportación del Ayuntamiento. El Gobierno vasco, por su parte, destinará 1.283.556,17 euros a cubrir las Ayudas de Emergencia Social en Barakaldo. Se trata de 58.301,83 euros más que en 2015.

Sin embargo, la alcaldesa ha decidido reducir de forma importante la cuantía máxima que se puede cobrar por ayuda. En el concepto con mayor porcentaje de preceptores en los últimos tiempos, el pago de cuotas del alquiler o la hipoteca, el límite pasa de 3.000 a 2.100 euros; es decir, 900 euros menos.

También se reducen de forma importante las ayudas para abordar los gastos de adaptación, reparación y/o instalaciones básicas en una comunidad de vecinos, cuyo tope cae en 750 euros; de 1.850 pasa a 1.150 euros.

En los gastos de alimentación la caída del límite por ayuda es de 100 euros (de 1.000 a 900 euros). Idéntico recorte se da para la compra de mobiliario o electrodomésticos (pasa de 700 a 600 euros), la compra de material sanitario básico como las gafas o audífonos y los gastos de mantenimiento del hogar -luz, agua, gas, alcantarillado, basuras, comunidad…-. En este último caso el tope cae de 600 a 500 euros.

Las reparaciones en viviendas tienen un límite de 600 euros, 121 menos que el año anterior. En cuanto a las ayudas para afrontar gastos de mobiliario esencial -cama, colchón, somier-, pasan de 350 a 300 euros.


FAMILIAS SIN AYUDA

Estos recortes se unen a la decisión del Gobierno local de dejar el año pasado sin ayuda a 261 familias. Para ello, se alegó “falta de presupuesto”, cuando el Ayuntamiento cerró el año con un superávit de 7,71 millones de euros. A cambio, se asumió el compromiso de atender a estas personas en 2016, lo que a buen seguro engordará la lista de posibles preceptores.

“De nada sirve cumplir con la recomendación del Ararteko de eliminar el límite del patrimonio que pueden disponer las personas que reciben la ayuda si luego mucha gente se queda sin recibir el dinero o recibe, como puede ocurrir este año, hasta 900 euros menos por ayuda”, se lamenta Alba Delgado.